Un WMS implementado en un servidor local requiere un cuarto de servidores, aire acondicionado, sistema contra incendios, un servidor costoso y el resto del hardware asociado, un UPS, generador, etc., lo cual en conjunto representan una inversión significativa en hardware, que en la mayoría de los casos no es necesaria para implementar un WMS en la nube.

Además, un servidor in situ requiere de una licencia de servidor WMS, una licencia de base de datos y licencias de usuario final, lo que implica también una inversión sustancial de capital inicial. Las soluciones en la nube tienen un costo de licencia inicial significativamente menor.

Tener una sala de servidores, un servidor físico, entre otros, requiere personal especializado en informática altamente calificados para efectuar el mantenimiento, así como también requiere de contratistas externos para el mantenimiento de los aires acondicionados, sistemas contra incendios, controles de seguridad eléctrica, sistemas UPS, generadores de respaldo, etc.

Los WMS basados ​​en la nube no requieren mantenimiento de hardware por parte del cliente y por lo tanto no generan estos gastos.

Dado que no se requieren actualizaciones ni del hardware ni del software del servidor y el cliente en todo momento se beneficia de trabajar con un sistema WMS actualizado. Adicionalmente, es probable que el costo total de una solución en la nube sea favorable en comparación con un sistema el equivalente implementado en un servidor local. Lo anterior respaldado por la naturaleza escalable de la nube.

Tener una solución WMS implementada en la nube permite a los empleados acceder informes e información en tiempo real desde cualquier lugar y en cualquier tipo de dispositivo. Por lo tanto, se puede acceder fácilmente a la información operativa, por ejemplo desde un tablet en la oficina central de la empresa sin tener que requerir de una conexión de red VPN segura al servidor en el sitio. Un WMS hospedado en la nube es totalmente compatible con el trabajo remoto, altamente requerido en los tiempos en los que vivimos.

El costo de la infraestructura de TI para mantener en funcionamiento un servidor en sitio es alto e involucra invertir en generadores, servidores y otros equipos de respaldo requeridos para garantizar la continuidad de la actividad comercial. Lo anterior muchas veces no es eficiente ni práctico para las empresas. Como los WMS implementados en la nube se alojan en granjas de servidores dentro de centros de datos a gran escala, la inversión en la infraestructura es factible porque se reparte entre los múltiples usuarios asociados y la responsabilidad del mantenimiento reposa del lado del proveedor.

Las soluciones con servidor local se alojan en un equipo con una capacidad conocida y limitada de recursos. Por lo general, para las soluciones in situ se selecciona un servidor que pueda alojar el software hoy y sea capaz de soportar el crecimiento estimado a plazo medio, además de las actualizaciones de software que requieren más recursos y que pueden instalarse en el futuro. Esto resulta inicialmente en la subutilización de los recursos adquiridos y, en una instancia posterior, tenga un límite de lo que puede soportar el servidor, lo que podría bien limitar el crecimiento de la empresa o hacer otra inversión relacionada con el hardware.

Las soluciones WMS la nube se alojan en granjas de servidores del centro de datos y tienen recursos virtualmente ilimitados. El principal beneficio es que el cliente solo paga por los recursos que utiliza su WMS, pero tiene la capacidad de aumentar significativamente sus capacidades para soportar cualquier nivel de crecimiento de forma inmediata.

Dado que el proveedor de un sistema WMS en la nube es responsable del mantenimiento del sistema y las actualizaciones, respaldos o copias de seguridad son imperceptibles para el cliente, se requieren considerablemente menos recursos de TI internos y se reduce el costo de continuidad del sistema.

Las soluciones WMS en servidor local requieren, adicional al mantenimiento y actualizaciones, requieren los recursos necesarios para llevar a cabo estas tareas. La mayoría de las empresas tienen personal TI limitados y concentran sus esfuerzos en la parte administrativa de la empresa, por lo tanto, las actualizaciones y las tareas de mantenimiento para la parte logística se retrasan o ignoran con frecuencia. Para las soluciones WMS alojadas en la nube, la responsabilidad del mantenimiento y las actualizaciones recae en el proveedor de software y, por lo tanto, no requiere ningún esfuerzo por parte del usuario final o de la empresa que utiliza WMS. Todas las actualizaciones y tareas de mantenimiento se realizan en segundo plano sin la participación ni el conocimiento del usuario.

Los WMS alojados en servidores locales por lo general reciben mantenimientos limitados. Con el paso del tiempo, el hardware se hace mas viejo y los sistemas demandan con mayor frecuencia rutinas de mantenimiento y actualizaciones, lo que resulta en una vulnerabilidad de la seguridad del sistema. Esto es especialmente cierto para los sistemas de desarrollo propio (In-House) ya que los mismos usualmente solo son sujeto de pruebas de funcionamiento en su implementación inicial. Al experimentar un error durante una actualización, reciben parches para solucionar rápidamente las vulnerabilidades y continuar funcionando aun si esto representa problemas de seguridad. En contraste, para los WMS ​​en la nube, el proveedor del software es responsable de garantizar que los riesgos de seguridad se atiendan y se mitiguen de manera adecuada. En la nube las soluciones WMS generalmente utilizan las herramientas y protocolos de seguridad más modernos, actualizados y sofisticados, lo que garantiza que los datos de los clientes estén seguros y que su operación continúe funcionando sin problemas.

Típicamente un WMS implementado en un servidor local tiene un ciclo de vida de aproximadamente 10 años, después de lo cual requiere una actualización importante a una nueva versión. Esta actualización puede ser muy costosa y usualmente requiere de nuevas licencias, servidores, tiempo y recursos de implementación, hardware, etc. Un WMS en la nube esta siendo constantemente actualizado y las mismas están disponibles para todos los usuarios al mismo tiempo cuando se actualiza el software. Este cambio es más frecuente y es responsabilidad del proveedor del WMS y tiene poco o ningún impacto en el usuario final, así como representa poco o ningún impacto financiero (no se necesita una inversión a gran escala como con para la solución con servidor local).

Los WMS implementados en servidores en sitio requieren una sala de servidores especial que tenga un UPS, aire acondicionado, un sofisticado sistema de extinción de incendios y otros requisitos con un alto costo de inversión inicial y requieren un mantenimiento frecuente, lo que aumenta el costo total de operación y gestión del sistema.

En la medida en la que hay más tecnología disponible para la gestión del almacén, como por ejemplo la Inteligencia Artificial, el internet de las cosas (IoT), Machine Learning, etc., es probable que los WMS ​​en servidor locales se vuelvan obsoletos rápidamente. Las soluciones WMS en la nube ofrecen API’s se actualizan constantemente y están listas para permitir la integración con cada vez más nuevas tecnologías, lo que las hace seguras y compatibles en el futuro de la industria.